Entrevista
Por Micaela Sosa

 

ARMENTÚ: ARTESANÍAS EN BARRICAS.

 

Estuvimos con Walter Sosa, el propietario de Armentú, quien cuenta a “Huellas de Tupungato”, los orígenes de su empresa y productos que elabora en su emprendimiento artesanal.
 
¿Qué relación tiene tu empresa con el vino?
Y… en principio las barricas con las que yo trabajo, son barricas que han contenido vino. Si bien yo las restauro; en el interior yo le dejo el toque natural que deja el vino al estar en contacto con la madera. Gracias a la “vinomanía” que hay, este tipo de trabajo se piensa orientado para destinar en el hogar, un espacio con toque bodeguero.
 ¿En qué año se creó Armentú?
En el año 2006 empecé a hacer barricas.
¿Qué fue lo que te motivó a crear este emprendimiento?
Me quería hacer una barrica para mí. Cuando la terminé, al que la veía le gustaba y se dio la oportunidad de hacerlo por encargue.
¿Cómo te decidiste por la marca de la empresa?
Yo buscaba y no sabía cómo ponerle y a mi hermana se le ocurrió ponerle “Armentú”. Yo le pregunté: ¿Qué es eso?;  y ella me dijo: “¿Qué… no sabes?; es la marca con la que firmaba el nono -abuelo paterno, Don Heraldo Sosa- que significa: Argentino, Mendocino, Tupungatino.
 ¿Con la que firmaba? ¿Por qué?  
Porque era poeta. Él escribía poesías, recitados.
¿Qué clase de muebles creas?
Son muebles artesanales a partir de barricas vinarias restauradas  que pueden ser: bodeguitas para guardar botellas de vino, con luz interior y puertita; juegos de living; macetones; canteros; bancos para barra; cajitas de té y muebles personalizados a medida.